¿Qué es un diferencial?
El diferencial es un elemento que permite que, en el momento que el vehículo está tomando una curva, sus ruedas propulsoras puedan describir sus respectivas trayectorias sin deslizamiento sobre el suelo. La necesidad de este dispositivo se explica por el hecho de que al dar una curva el coche, las ruedas interiores a la misma recorren un espacio menor que las situadas en el lado exterior, puesto que las primeras describen una circunferencia de menor radio que las segundas.
El diferencial reparte el esfuerzo de giro de la transmisión entre los semiejes de cada rueda actuando como un mecanismo de balanza; es decir, haciendo repercutir sobre una de las dos ruedas el par, las vueltas o los ángulos de giro que pierda la otra.
Esta característica de funcionamiento supone la solución para el adecuado reparto del par motor entre ambas ruedas motrices cuando el vehículo describe una curva, pero a la vez es un serio inconveniente cuando una de las dos ruedas pierden tracción con el suelo de forma total o parcial.
Lo que nos compete: El Diferencial Torsen
Su nombre procede de las palabras inglesas Torque Sensitive (sensible al par. Este sistema fue inventado por Vernon Gleasman y fabricado por el Gleason Corporation. Se trata de diferencial central autoblocante que regula la potencia entre los ejes delantero y trasero de acuerdo con la demanda. Responde en función de la variación de las fuerzas de rotación entre los ejes de entrada y de salida (eje delantero y trasero).
Funcionamiento del diferencial Torsen
El diferencial Torsen emplea un conjunto de ruedas helicoidales para funcionar. Estas ruedas son las encargadas de reducir o aumentar la cantidad de fricción gracias a su mecanismo. Los dientes de las ruedas tienen unas zonas de contacto que se mueven a lo largo de una línea recta o a través del diente en sí mismo.
En el momento en el que el vehículo se encuentra tomando una curva, los ejes se encuentran girando sobre sí mismos, y en función de este movimiento giratorio, uno de los ejes aumentará su giro y el otro lo reducirá.
Ventajas y desventajas del diferencial Torsen
Ventaja
- Rápida respuesta de actuación.Tracción permanente en la 4 ruedas.No interviene en el funcionamiento del ABS
- Reparto preciso del par a las ruedas
- Otra de las ventajas que ofrece este sistema, es que no solo actúan en aceleración, también lo hacen en los momentos de frenado. Un dato muy importante, pues en muchas ocasiones en el momento de frenar, ya sea en una curva, o en carreteras con irregularidades, este sistema aporta más par de frenado a la rueda que más lo necesite, ya sea la izquierda o derecha.
Desventaja
- Sistema muy caro. Los vehículos que lo equipan no pueden ser arrastrados. Sistema muy rígido.
- No es compatible con electrónica, debido a su concepción mecánica.
Dentro de los autoblocantes Torsen, encontramos 3 variantes dependiendo de su constitución interna. Estos los denominamos T-1, T-2 y T-3.
La versión T-1, el sistema utiliza un cruce de engranajes helicoidales para aumentar la fricción interna. El tipo I se pueden diseñar para relaciones de par más alta que la de tipo II, este sistema es más brusco, y es más propenso al ruido, además de mayores vibraciones y mayor dureza. Este tipo, debido a su constitución requiere una configuración e instalación más precisa.
La versión T2 del diferencial Torsen, difiere con respecto al T1 en la posición de los engranajes satélites que están encima de las ruedas, ya que en vez de estar cruzados están paralelos. El funcionamiento es exactamente el mismo. Sobre la base de este T2, existe una versión para modelos de competición llamado T2-R (RaceMaster).
El modelo T3 cambia su composición interna, pasando de utilizar engranajes helicoidales y de dientes rectos a usar un sistema planetario (imagen posterior). La particularidad de esta versión es que el reparto de par nominal no es 50/50 como pasa en las otras versiones.
Como dato informativo final, en la última década se han dotado a los diferenciales Torsen de ayudas electrónicas como los sensores de tracción electrónicos que incluyen los sistemas de ABS. Gracias a esto, sus lecturas del estado de la tracción son más eficientes. De hecho, estos diferenciales los han usado mucho y desarrollado Audi, con su famoso sistema quattro.